Amores De Fin De Siglo

Santiago y Constanza tienen siete años casados, Anastasia y Diego siete horas, cada pareja representa con fidelidad las diferentes versiones de amor que pululan en la inmensidad de una ciudad llena de gente.

Sus historias se desarrollan en edificios contiguos: Uno de cara hacia el sur, habitado por la clase media de un país; el otro, que ve hacia el oeste, siempre es testigo del ocaso del día, es allí donde hace vida la clase popular.

El evidente ruido no para y a diario atenta contra las historias de amor, pero estas se imponen una y otra vez. El susurro de las parejas, en su momento de mayor intimidad, se logra percibir incluso a través de los muros de concreto, convirtiéndose en uno.

Ezequiel Camacho es un párroco jesuita que complementar esta historia. En la zona es conocido por su polémico carácter, pero Lejana San Miguel, una prostituta, significará para él quizá la mayor prueba que haya tenido que afrontar.

Estas parejas deberán transitar por una delgada línea que las podría llevar a cielo o al infierno. Las tentaciones, los deseos reprimidos, así como las buenas intenciones y  el amor sincero, son el pan de cada día en esta historia de Amores de fin de siglo.

La estructura narrativa de Amores de Fin de Siglo, la convirtió en una exitosa y muy vendida producción de RCTV, lo que dio como resultado su expansión por todo el continente americano, parte del Medio Oriente y Polonia con óptimos resultados.