Para contar una buena historia evidentemente hace falta un buen narrador. Y si bien el concurso de todas las áreas de producción son absolutamente necesarias para obtener una excelente serie o una telenovela, gran parte del secreto del éxito está en el guion.

En RCTV hemos contado con memorables tramas provenientes de insignes plumas latinoamericanas y del resto del mundo. Entre esos escritores destaca Delia Fiallo, “La madre de la telenovela latinoamericana”, como también fue conocida una de las autoras más prolíficas y exitosas de toda la región.

Los desvelos ocasionados por las tramas de amores no correspondidos, galanes adinerados y de buenos sentimientos, damas en apuros, marcadas diferencias de clases sociales y personajes llenos de una maldad casi indescriptible son, en gran medida, responsabilidad del ingenio y creatividad de Delia Fiallo, quien también provocó que varias generaciones de niños llevaran el nombre de los principales personajes de sus telenovelas.

“La búsqueda de la pareja, en definitiva, es uno de los problemas más grandes del ser humano, hombre o mujer”, aseguró la escritora durante una entrevista con Napoleón Bravo en el programa de RCTV, Dimensión Humana.

La guionista de origen cubano llegó a escribir hasta 35 páginas diarias para algunas de sus telenovelas, en una vieja máquina de escribir, ya que sentía aversión por las computadoras. Así que, golpeando rápidamente las teclas de lo que es hoy una reliquia mecanográfica, surgieron éxitos de RCTV como TopacioKassandra, Cristal, entre muchos otros que, luego de dominar el rating de la audiencia venezolana, se convirtieron en producciones con calidad de exportación y excelentes resultados a nivel internacional.

La telenovela Topacio, transmitida en 1984 por RCTV, basada en Esmeralda, de la propia Delia, despejó el camino de la internacionalización como actriz de Grecia Colmenares. Esta producción, que batió récords de audiencia en toda Hispanoamérica y parte de Europa, se convirtió en la primera telenovela en traducirse al idioma inglés.

Cristal, protagonizada por Lupita Ferrer, Jeannette Rodríguez y Carlos Mata, siguió a Topacio en una suerte de triunfos consecutivos que surgían de la imaginación de la escritora cubana. En 1986 el mercado europeo le da la bienvenida a los dramáticos venezolanos con esta historia de amor y por la que hoy día sus protagonistas son reconocidos en diversos lugares del mundo. Por mencionar alguno de sus logros, la transmisión del capítulo final de Cristal marcó niveles de audiencia récord en España.

La audiencia del viejo continente se rindió ante los episodios de Kassandra, al punto de recibir el reconocimiento del libro de récords Guinness como la telenovela más transmitida del mundo (180 países) y traducida, al menos, a 80 idiomas. Además, esta obra de Delia Fiallo se encuentra entre las cinco más famosas e influyentes de la historia, al punto de destacar su papel pacificador de las tensiones bélicas durante el conflicto entre Bosnia y Herzegovina.

Y es que la fuente de inspiración de esta extraordinaria escritora y guionista probablemente procedía de una cotidianidad no muy lejana a ella. “Yo creo que ese problema amoroso en una mujer es una novela… En la mía lo fue”, expresó en el programa Dimension Humana, mientras narraba las dificultades por las que atravesó en su breve primer matrimonio y como pudo vencer los obstáculos para casarse en segundas nupcias con el amor de su vida.

La autora confesó, además, que al encontrar el verdadero amor consiguió la armonía que le permitió comunicarse de una manera mucho más fácil.

“La telenovela es el producto cultural más importante de Latinoamérica”, de acuerdo con el profesor chileno Eduardo Santa Cruz. En ese sentido, Delia Fiallo ha sido uno de los personajes de mayor peso que ha contribuido con esa realidad.

La insigne escritora, que con su pluma llegó a los hogares de millones de personas en todo el mundo, siempre recalcó el respeto que RCTV tuvo con sus producciones y para RCTV es un orgullo haber recreado las historias narradas por esta mujer que supo entender el sentimiento de tantas personas y aprendió a expresarlos de manera sin igual. Ella vivirá por siempre en el amor de sus personajes.

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